Obama: "La clave en esta tormenta es seguir las instrucciones"

Esta grúa colapsó en Manhattan en un rascacielos en construcción. El peligro es latente por el eventual desplome de la estructura.

Esta grúa colapsó en Manhattan en un rascacielos en construcción, entre tanto 'Sandy' avanza con vientos de hasta 150 kph.
El presidente Barak Obama volvió a dirigirse al país el lunes por la tarde desde Washington para llamar la atención de la ciudadanía para que "hagan caso a las instrucciones de las autoridades porque de lo contrario podrían haber víctimas mortales".

El presidente remarcó que está muy satisfecho por los trabajos de coordinación con los gobiernos locales y "tenemos confianza de que ya todo lo necesario está suministrado" para responder a las emergencias a causa del paso del huracán Sandy.

"Esta es una tormenta grande y muy difícil. Viene mucha agua, habrán muchos recortes eléctricos y para que todo vuelva a la normalidad va tomar tiempo. pero estoy confiado que trabajando unidos vamos a superar estos tiempos difíciles", dijo el presidente Obama.

"Sigan las instrucciones de las autoridades estatales y locales ya que éstas van a darles la mejor información en términos de cómo enfrentar esta tormenta en los próximos días”, precisó.

Las lluvias de Sandy llegaron esta madrugada de lunes a Washington, la capital del país, donde las escuelas, el transporte y las oficinas de gobierno han cerrado en prevención de los estragos que puede provocar la tormenta. Por el momento las lluvias todavía son ligeras aunque constantes y los vientos se han intensificado, pero no se han presentado vientos huracanados, aunque en estados como Delaware ya se han presentado inundaciones.

Pero el sistema público de transporte –incluyendo el metro, el tren de Virginia y el sistema de transporte en Maryland– cesó sus operaciones, mientras las escuelas y universidades del área anunciaron que permanecerán cerradas martes y miércoles también.

En cambio en las costas de Carolina del Norte, Virginia y Maryland en EE.UU. donde Sandy ya está prácticamente encima, las mareas y los vientos han sido muy fuertes en lo que se espera se la tormenta perfecta, cuando entre lunes y martes se encuentren el huracán que vienen del Caribe y el frente polar que baja de Canadá.

En las inmediaciones del puerto de Nueva York (el área de agua comprendida entre la desembocadura del río Hudson y el puente de Verrazano) el agua se podría elevar más de tres metros si el pico de las marejadas ocurre en el momento de la marea alta.

Ese fenómeno se vivió el domingo en Miami Beach y en otras zonas de Florida, pese a la lejanía ya del centro del huracán: coincidiendo con los picos de la marea (hacia las 8.00 y hacia las 20.00, horas locales) calles que no estaban en primera línea de la costa se inundaron durante horas.

Por el momento, el agua ya había subido entre 60 y 90 centímetros en el puerto de Nueva York y el estrecho de Long Island antes de las 04:00 GMT, según el Servicio Meteorológico Nacional. Mientras tanto, en la ciudad se puede sentir cómo el viento ha subido progresivamente de intensidad desde la tarde del domingo y tiene ya rachas fuertes.

"En la ruta prevista el centro de 'Sandy' seguirá avanzando en paralelo a la costa sureste de Estados Unidos durante el fin de semana", según el Centro Nacional de Huracanes (CNH) en su comunicado de media noche.

Aunque la tormenta ha estado avanzando algo inclinado hacia el noreste (lo que le aleja de la costa estadounidense), los meteorólogos del CNH prevén que corrija su trayectoria, gire hacia el noroeste y acelere algo más su velocidad de desplazamiento.

Los vientos huracanados de ‘Sandy’ se pueden notar a unos 165 kilómetros del centro del fenómeno. Las previsiones se complicarían aún más en el caso de que el huracán impacte con un frente polar que llega del norte, lo que podría desencadenar condiciones meteorológicas muy extremas.

Desde Roma el papa Benedicto XVI expresó su solidaridad con las víctimas del huracán a su paso por el Caribe. “En los pasados días un devastador huracán se ha abatido con gran violencia sobre Cuba, Haití, Jamaica y Bahamas, causando muertos y daños y obligando a numerosas personas a abandonar sus casas. Expreso mi cercanía y solidaridad con todos. Es necesario que se ayude a todos los damnificados”, dijo el Sumo Pontífice.

A su paso por las islas del Caribe el huracan 'Sandy' deja 65 muertos y miles de damnificados.