El presidente de Ecuador Lenín Moreno dijo que el exmandatario Rafael Correa, debería regresar a Ecuador para comparecer ante la justicia.
Moreno hizo la afirmación el jueves después que la Corte Nacional de Justicia emitiera una orden de prisión preventiva por la presunta vinculación de Correa al secuestro de un opositor en 2012.
"Yo creo que el presidente (sic) Correa debería venir, debería venir, y a veces desearía verdaderamente que resulte inocente de lo que se le acusa", señaló Moreno en un encuentro con la prensa extranjera en el palacio presidencial.
El exmandatario fue vinculado el 18 de junio al presunto intento de secuestro del exasambleísta Fernando Balda, registrado en 2012 en Colombia.
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Durante esa audiencia, la jueza dispuso como medida cautelar la presentación periódica cada 15 días en la Corte Nacional de Justicia. No obstante, el expresidente incumplió la disposición de la juez
El 3 de julio pasado, la Corte Nacional de Justicia (CNJ) dictó orden de prisión preventiva contra Correa y este jueves informó que activó una circular roja de Interpol para su extradición.
“Interpol proceda a la inmediata localización y captura del ciudadano Rafael Correa para fines de extradición y una vez que cumpla lo dispuesto será remitido a la Cárcel 4 a disposición de esta Judicatura”, dice el tribunal en un comunicado.
Durante su encuentro con los periodistas, el presidente Moreno manifestó su asombro por el cambio que según dice experimentó Correa desde que lo conoció.
"Me espeluzna saber que el joven idealista que conocí en el 2006 se haya convertido de manera extraña, de manera siniestra, en un personaje de esa calidad", indicó.
Moreno agregó que "tampoco es agradable haber sido vicepresidente durante dos ocasiones de una persona que ha tenido comportamientos autoritarios" y durante cuyo mandato "se han realizado de manera clandestina, de manera subterránea, secuestros, violaciones de los derechos humanos y asesinatos".
Moreno fue vicepresidente de Correa entre 2007 y 2013. Ambos sostienen una pugna de poder que llevó a la crisis al oficialismo, en el poder desde hace una década.
El miércoles, Correa dijo a la AFP que retornar a Ecuador sería "casi un suicidio", pues considera que no tiene "garantías", y dejó entrever la posibilidad de pedir asilo en Bélgica al estimar que ese país "jamás" daría trámite a su extradición.
Rafael Correa vive en Bélgica desde que dejó el poder en mayo de 2017.