Submarinos no tripulados, material para escalar inspirado en las lagartijas y contenedores que pueden ser activados para subir a la superficie desde el fondo del mar, son parte de las nuevas tecnologías que desarrolla el Ejército estadounidense.
La Agencia de Proyectos de Investigación de Defensa Avanzados, (DARPA por sus siglas en inglés), mostró más de 60 de sus invenciones, conceptos y programas, como parte de un evento anual conocido como Demo Day, donde la comunidad de defensa estadounidense muestra proyectos en varias etapas de desarrollo.
Las creaciones están dirigidas al uso en el mar o en el espacio y buscan mejorar todos los aspectos de combate, ya sea en tierra, en el internet o cosas que el enemigo ni siquiera sospecha y que se denominan "semillas de sorpresa".
Entre las innovaciones más destacadas está un submarino no tripulado llamado ACTUV. Tiene 40 metros de largo por 3,3 de ancho, pesa 127 toneladas métricas y puede navegar hasta 10.000 millas náuticas con un solo tanque de combustible.
El ACTUV puede detectar y perseguir submarinos enemigos, hacer patrullas de seguridad alrededor de grupos de portaaviones y ahorrar al Pentágono decenas de millones de dólares al no requerir tripulantes.
Otro nuevo concepto es el Upward Falling Payload (UFP), un contenedor que puede pasar años en el fondo del mar hasta ser activado remotamente para reflotar o hundirse en el mar a conveniencia.
Otra innovación que desarrolla el ejército estadounidense es el Geckskin, un material adhesivo sintético reversible que trata de reproducir los sistemas biológicos de lagartijas y arañas para mejorar la habilidad de escalar de los soldados con grandes mochilas de combate, sin usar cuerdas o escaleras.