El Senado de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley que propone profundos cortes al presupuesto federal, generando un largo enfrentamiento entre los legisladores republicanos y el presidente demócrata Barack Obama.
En una sesión que duró toda la noche hasta las primeras horas de este viernes, los senadores aprobaron su versión de un presupuesto balanceado que propone 5,1 billones de dólares en recortes al gasto para la próxima década. La mayor parte del ahorro provendría de cortar el cuidado de salud. Los fondos para las fuerzas armadas aumentarán.
El plan de presupuesto del Senado para 2016 es similar a uno aprobado anteriormente esta semana por la Cámara de Representantes que balancearía el presupuesto en nueve años. Las dos cámaras controladas por los republicanos trabajarán para resolver las diferencias entre las dos propuestas dentro de dos semanas, cuando culmine un receso del Congreso.
Los planes republicanos probablemente sean rechazados por el presidente Obama, quien en febrero presentó un presupuesto de casi 4 billones de dólares que aumentaría impuestos y gasta grandes cantidades en mejorar la infraestructura en Estados Unidos.
Sin embargo, los planes de Obama y de los republicanos son similares en lo referente al gasto de defensa.
Los senadores también aprobaron decenas de otras medidas no obligatorias y no relacionadas al presupuesto durante la maratónica sesión de 15 horas. Muchas de las enmiendas consideradas durante la sesión estuvieron destinadas a centrar la atención a una causa particular o forzar a los legisladores a tomar una posición sobre temas controversiales.