Sin importar si los días son calurosos o fríos, Charlie Koiner cuida de las frutas y vegetales que crecen en su cultivo, compuesto por materas pequeñas y grandes y ubicado a pocas cuadras del centro de Silver Spring, Maryland, un área urbana a pocos minutos del centro de Washington.
Koiner, de 90 años, cultiva una gran variedad de productos en el jardín que tiene al lado de la casa que compró hace 30 años. Él lo llama “la mejor inversión que cualquiera podría hacer”.
“Tengo una hectárea o 4.000 metros cuadrados de tierra y eso me da espacio para hacer todo el trabajo que quiero”, dice Koiner, y agrega que “esto me mantiene ocupado viendo crecer las plantas. Lo disfruto”.
Koiner nació y creció en una granja que ahora es un centro comercial en un suburbio muy popular de Washington.
“Ese era el lugar de mi abuelo y ahí teníamos alrededor de 30 hectáreas. Teníamos caballos, vacas, gallinas y un jardín gigante”, recuerda Koiner.
Ahora él está orgulloso de los productos que cultiva y de que sus clientes frecuentemente le visiten para ellos mismos recoger sus productos de la tierra.
Muchos de ellos son regulares, ese el caso de Martha Grundmann, quien por casualidad encontró los cultivos de Koiner.
“Estaba manejando un día, tome un desvío y me di cuenta de las lechugas y pepinos. Pensé, ¿un jardín en medio de la ciudad?”, dice Grundmann, quien añade que desde ese momento, para a comprar sus vegetales todas las semanas.