Joyce Mitchell, la costurera de la Correccional Clinton del estado de Nueva York que ayudó a escapar a los criminales Richard Matt y David Sweat en junio, desatando una masiva cacería, fue sentenciada el lunes.
Mitchell se declaró culpable en julio de promover el contrabando en prisión y de facilitar la fuga de criminales. En la audiencia de este lunes, la mujer fue sentenciada a un periodo de cárcel que puede ir de 2 años 4 meses a 7 años por el primer cargo, y a 1 año adicional por el segundo.
En adición fue multada con $5.000 dólares por el primer cargo y $1.000 por el segundo.
Con lágrimas en los ojos, Mitchell dijo al juez Kevin Ryan que se sentía avergonzada y que lo daría todo si pudiera, para deshacer lo que hizo.
"Tengo 51 años. Y este es sin duda el peor error de mi vida. Vivo con la culpa cada día y lo seguiré haciendo el resto de mi vida". Señaló además que está buscando ayuda sicológica y ha entregado sus credenciales de maestra.
El juez, respondió que no creía en sus palabras. "En cualquier momento usted pudo haber impedido la fuga", afirmó Ryan.
Mitchell dijo que ayudó a los prisioneros porque temía por su vida y la de su esposo. Pero medios de prensa informaron que ella sostuvo una relación íntima con Matt.
La mujer proporcionó a los reos herramientas para ayudarlos a escapar, escondiéndolas en carne molida para hamburguesas, dijo la policía.