Los niños siguen siendo víctimas de la violencia armada y las hostilidades en Colombia al ser reclutados por grupos armados ilegales y asesinados o mutilados por minas, disparos o ataques aéreos, denunció Naciones Unidas el miércoles.
En un informe de la Oficina de la Representante Especial del Secretario General para los Niños y el Conflicto Armado, la ONU dijo que al menos 220 niños fueron reclutados o usados por grupos armados ilegales entre julio de 2019 y junio de 2021. El informe agregó que estos grupos son principalmente disidentes de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN).
El reporte también destacó que otros 118 niños fueron asesinados o mutilados en ese mismo periodo. La representante especial, Virginia Gamba, destacó en el informe que Colombia es uno de los países del mundo más afectados por explosivos que han quedado escondidos desde la época del conflicto armado interno y pidió a los grupos armados que cesen su uso indiscriminado. También pidió al gobierno colombiano que refuerce las actividades de desminado.
En Colombia se lleva a cabo una campaña de desminado. Un reporte dado por el gobierno a mediados de diciembre indicó que 78% del territorio colombiano está libre de sospecha de minas antipersonales, aunque el peligro persiste. La Defensoría del Pueblo ha advertido que los niños y niñas de las zonas rurales corren especial riesgo de resultar heridos.
Las FARC y el gobierno colombiano firmaron en 2016 un acuerdo de paz que acabó con medio siglo de conflicto armado. Sin embargo, varios grupos ilegales siguen usando la violencia para mantener control sobre rutas del narcotráfico.
El ELN es la última guerrilla activa en Colombia y con la que el gobierno no ha logrado reanudar una mesa de diálogo desde enero de 2019.
La utilización de niños y niñas en el conflicto armado colombiano se ha dado en todos los niveles: han servido como apoyo logístico de grupos armados dando información, transportando armas y droga y combatiendo.
Entre 1958 y 2020 se registraron más de 17.800 víctimas, de acuerdo con las cifras públicas del estatal Centro Nacional de Memoria Histórica. Sin embargo, estas cifras podrían ser mayores. De acuerdo con el tribunal de paz del país, las FARC presuntamente reclutaron 18.677 niños y niñas. En el marco de este reclutamiento, señaló en tribunal, algunos menores fueron víctimas de abortos y anticoncepción forzados y violencia sexual.
El informe de la ONU del miércoles destacó que el desplazamiento forzado es otro grave problema que afecta a los niños. Las familias huyen de sus hogares debido a la amenaza del reclutamiento, sobre todo en los departamentos de Arauca y Meta, dijo el reporte.
La violencia sexual a menores en el periodo estudiado del informe afectó a 14 niños y los secuestros a 10, según la ONU. La organización, sin embargo, destacó que los episodios violentos en los que niños se ven involucrados se han reducido en Colombia tras el acuerdo de paz de 2016.
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