Vladimir Putin asumió este lunes la presidencia de Rusia haciendo un llamamiento a la unidad nacional en su tercer mandato al frente de los destinos del país, esta vez de seis años, durante los cuales prometió reforzar la democracia.
"Hoy entramos en una nueva etapa (…) los años próximos años serán determinantes para el destino de Rusia en las décadas por venir", dijo Putin, quien hasta ahora se desempeñó como primer ministro tras dos primeros periodos como presidente, entre el 2000 y el 2008.
La ceremonia de investidura llevada acabo en el Kremlin tuvo de antesala la víspera una multitudinaria manifestación antigubernamental convocada por la oposición y que fue violentamente reprimida por la policía.
Según las autoridades, unas 8.000 personas tomaron parte en la protesta durante la que fueron detenidos mas de 400 manifestantes, entre ellos el líder del Frente de Izquierda, Serguei Udaltsov, el bloguero anticorrupción Alexey Navalny y el antiguo viceprimer ministro, Boris Nemtsov. En los choques resultaron heridos 29 policías.
"Creímos en nosotros y en nuestros poderes, fortalecimos el país y restablecimos la dignidad de nuestra gran nación”, dijo Putin, quien elogió la labor su aliado y presidente saliente, Dmitri Medvedev.
En la investidura, entre otras personalidades, estuvieron presentes el patriarca de la iglesia Ortodoxa rusa Kirill, el gran rabino Berl Lazar, el ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, el ex presidente soviético Mijail Gorbachov y el ex canciller alemán Gerhard Schroeder.
Tras asumir el cargo, el nuevo presidente propuso al Parlamento la candidatura de Medvedev para el puesto que él deja de primer ministro cuya aprobación se da por segura, con lo que los rusos seguirán siendo dirigidos por los dos hombres que en los últimos años los gobernaron.
Putin fue electo presidente el pasado 4 de marzo con casi el 64 por ciento de los votos en unos comicios denunciados como fraudulentos por la oposición.
"Hoy entramos en una nueva etapa (…) los años próximos años serán determinantes para el destino de Rusia en las décadas por venir", dijo Putin, quien hasta ahora se desempeñó como primer ministro tras dos primeros periodos como presidente, entre el 2000 y el 2008.
La ceremonia de investidura llevada acabo en el Kremlin tuvo de antesala la víspera una multitudinaria manifestación antigubernamental convocada por la oposición y que fue violentamente reprimida por la policía.
Según las autoridades, unas 8.000 personas tomaron parte en la protesta durante la que fueron detenidos mas de 400 manifestantes, entre ellos el líder del Frente de Izquierda, Serguei Udaltsov, el bloguero anticorrupción Alexey Navalny y el antiguo viceprimer ministro, Boris Nemtsov. En los choques resultaron heridos 29 policías.
"Creímos en nosotros y en nuestros poderes, fortalecimos el país y restablecimos la dignidad de nuestra gran nación”, dijo Putin, quien elogió la labor su aliado y presidente saliente, Dmitri Medvedev.
En la investidura, entre otras personalidades, estuvieron presentes el patriarca de la iglesia Ortodoxa rusa Kirill, el gran rabino Berl Lazar, el ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, el ex presidente soviético Mijail Gorbachov y el ex canciller alemán Gerhard Schroeder.
Tras asumir el cargo, el nuevo presidente propuso al Parlamento la candidatura de Medvedev para el puesto que él deja de primer ministro cuya aprobación se da por segura, con lo que los rusos seguirán siendo dirigidos por los dos hombres que en los últimos años los gobernaron.
Putin fue electo presidente el pasado 4 de marzo con casi el 64 por ciento de los votos en unos comicios denunciados como fraudulentos por la oposición.