Los arzobispos y obispos venezolanos expresaron este jueves su preocupación por la situación política y social del país y, entre otras cosas, criticaron que se celebren elecciones parlamentarias en este contexto, por lo que hicieron un llamado a un cambio de actitud por todas las partes.
“El evento electoral convocado para el 6 de diciembre, lejos de contribuir a la solución democrática de la situación política que hoy vivimos, tiende agravarla”, indicaron los religiosos.
Aseguran que es “inmoral” realizar una comisión cuando los ciudadanos “sufren las consecuencias de la pandemia, carecen de las condiciones mínimas para su subsistencia, y no existe transparencia de las reglas y mecanismos de verificación que deben regir un proceso electoral”.
Estas reflexiones sobre la situación del país, que calificaron como “dramática”, se dan en una exhortación pastoral de la Conferencia Episcopal Venezolana (CVE) luego de reuniones de Comisiones Episcopales esta semana.
En el comunicado piden un “cambio de actitud” en toda la dirigencia política del país. Aseguran que el gobierno en disputa de Nicolás Maduro pareciera tener como único objetivo “permanecer a toda costa en el poder”; mientras que la oposición está dividida y sin una “verdadera alternativa de cambio”.
“Tanto el oficialismo como la oposición venezolana no presentan un proyecto de país que logre reunir y convencer la voluntad de mayoritaria del pueblo venezolano de vivir en justicia, libertad y paz”, se lee en el texto.
También se refirieron a la oleada de protestas, que reportó su mayor índice en lo que va de año en septiembre con 1.193 concentraciones, según el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social.
Rechazaron que las personas que ejercen este derecho reciban “como respuesta de las autoridades la censura informativa, la represión de los organismos policiales y militares y la persecución política por vía judicial”.
Reiteran su posición de que “no basta la simple abstención”, como lo indicaron luego de que 37 partidos opositores informaran oficialmente que no participarían en las elecciones parlamentarias.
Aseguran que es necesario “acompañar la protesta pacífica, cívica y social que hoy se extiende por todo el país”, además de “establecer una ruta clara para la transformación pacífica política, democrática y civil”.
Los arzobispos y obispos apuntaron que los venezolanos quieren resolver la cuestión política a través de la vía electoral, con elecciones parlamentarias y presidenciales “con condiciones de libertad e igualdad para todos los participantes”.
