Chile comenzó a operar los vuelos a Argentina que habían sido suspendidos por la nube de cenizas del volcán Puyehue, en el Cordón Caulle de la cordillera chilena, mientras algunos aeropuertos de la región continúan paralizados como Bariloche, Chapelco, Esquel, Trelew, Viedma y Bahía Blanca.
Los restos de la nube volcánica expulsada por el volcán Puyehue llegaron hasta Paraguay, Brasil y Uruguay causando problemas en el transporte aéreo.
La nube de humo y cenizas de 10 kilómetros que produjo el volcán Puyuhe, en el Cordón Caulle de la cordillera andina, continúa afectando a las ciudades de la Patagonia chilena y argentina, llegando incluso hasta el Atlántico.
Su última gran erupción se había registrado en 1960, poco después de un terremoto de magnitud 9,5, la más alta registrada históricamente a nivel mundial.
La nube de gas venenoso avanzó hacia el valle Riñinahue, donde la población ya había sido evacuada los días anteriores, informó el gobernador de la región de Los Ríos, Juan Andrés Varas, según recoge Associated Press.
Frente a la nube "no tenemos ninguna defensa, no sirve correr, no sirve refugiarse en las casas", añadió. Afirmó que se trata de "un gas venenoso mezclado con cenizas y con humo que, directamente, mata todo".
También Enrique Valdivieso, director nacional del Servicio Nacional de Geología y Minería, explicó que, "lo que se ha informado es que hay concentración de gases y uno de ellos es con azufre, pero no debería ser una preocupación ni (causar) alarma pública".
Unas 4.000 personas fueron evacuadas de la región desde que el sábado comenzara a entrar en actividad el volcán, según informaron las autoridades.
Hasta hoy, el territorio argentino se había visto aún más perjudicado que el propio Chile debido a los fuertes vientos que desplazaron los gases y cenizas a larga distancia, lo que obligó a cancelar los vuelos procedentes de Bariloche y otras localidades cercanas.
“La situación es de caos total, parece que estamos en plena guerra mundial”, explica Leticia Meier, que se encontraba de vacaciones en Bariloche, y al intentar volver a Buenos Aires quedó atrapada en Trelew, a unos 700 kilómetros. “Los vuelos están cancelados y los autobuses ‒que tardan 22 horas‒ salen llenos. No veo nada a un metro de distancia, porque el viento es muy fuerte y ha traído todos los restos de cenizas”, explica Leticia, que aspiraba a tomar un autobús antes de que cierren las calles.
Tras 51 años de inactividad, "se ha iniciado el proceso eruptivo del Cordón Caulle, registrándose una explosión y como producto de ello una columna de gases con una altura aproximada de 10 kilómetros", afirmó el Servicio Nacional de Geología y Minas (Sernageomin) en un comunicado, horas después de haber advertido de una fuerte actividad sísmica en la zona, recoge France Press.
La alerta roja del volcán subió a 6 puntos en una escala de 8 niveles, después de que entrara en una erupción moderada, indicó la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi).
Los habitantes de once municipios tuvieron que dejar sus hogares a modo de precaución para pasar la noche en albergues alejados del volcán.
El ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, explicó que debido a la erupción iniciada "también está absolutamente cerrado el paso fronterizo internacional Cardenal Samoré que ha sido evacuado por parte del gobierno (chileno), y donde el gobierno argentino hizo lo propio en el Paso Angostura".
En Argentina, la turística localidad patagónica de Bariloche, se vio contagiada por la nube de cenizas procedentes de la frontera, a unos 100 km al este del volcán Puyehue. Las autoridades cerraron el aeropuerto y a recomiendan permanecer en casa. El espacio aéreo argentino continúa con problemas.
El volcán Puyehue, de 2.240 m de altitud, se encuentra en el complejo volcánico del cordón Caulle, en la cordillera de Los Andes, y su última gran erupción fue en 1960, tras un terremoto de 9,5 grados Richter en Valdivia.