Obama enfrenta el déficit

El sábado el presidente Obama se detuvo por sorpresa en el monumento en memoria de Abraham Lincoln, para saludar a los visitantes.

Dentro de algunas semanas el gobierno llegará al límite de gasto impuesto por el Congreso y a menos que el límite sea aumentado.

Después que demócratas y republicanos lograran un acuerdo de último minuto para dar fondos al gobierno estadounidense y evitaran un cierre de actividades, se aproxima una nueva batalla por el presupuesto que tendrá consecuencias a más largo plazo para las finanzas del país.

Los trabajadores federales y quienes dependen de servicios del gobierno respiraron más tranquilos el viernes 8 de abril de 2011 cerca de la medianoche, cuando los legisladores lograron un acuerdo para dar fondos al gobierno hasta el fin del año fiscal, el 30 de septiembre de 2011.

Sin embargo, la batalla por el presupuesto está lejos de terminar. De hecho, apenas comienza.

El presidente Barack Obama presentará nuevos planes, esta semana, para reducir el déficit federal, en parte con cortes a los programas médicos del gobierno para los ancianos y para los pobres.

El asesor presidencial David Plouffe, dijo en el programa “This Week” de la televisora ABC que el presidente presentará su propia propuesta presupuestal en un discurso que pronunciará el miércoles 13 de abril de 2011.

“El compromiso del presidente con la reducción de gastos y la reducción del déficit es absolutamente firme" dijo David Plouffe. "Pero mientras hacemos eso, tenemos que asegurarnos que no dañamos la capacidad de nuestra gente de obtener la educación que necesita para competir con la gente en Beijing y Bangalore, y que estamos invirtiendo en investigación y desarrollo, que estamos invirtiendo en infraestructura”, precisó.

Los republicanos dicen que esperan que la propuesta del presidente se más amplia que el plan presupuestal que presentó al Congreso a comienzos de este año.

El senador republicano de Alabama, Jeff Sessions, dijo en el programa “Face the Nation” de la cadena CBS, que “este presupuesto que el presidente presentó hace algunas semanas es el más irresponsable presupuesto jamás presentado al pueblo estadounidense. Estamos en una crisis financiera. No hace nada para cambiar la trayectoria en la que estamos”, criticó Sessions.

Ahora, los legisladores enfrentan una decisión crítica, si autorizar al gobierno federal a pedir prestado el dinero necesario para financiar el actual déficit que este año se sitúa en $1.500 billones de dólares.

Dentro de algunas semanas el gobierno llegará al límite de gasto impuesto por el Congreso y a menos que el límite sea aumentado. Estados Unidos podría cesar el pago de billones de dólares de su deuda, la mayoría de la cual es con gobiernos extranjeros.