Somalia: reclutan a niños soldados

Un niño soldado hace ejercicios militares con el grupo islámico al-Shabab.

Los niños son reclutados muchas veces a la fuerza en colegios islámicos y en sus aldeas, y si sus padres intentan rescatarlos son asesinados.

Trabajadores humanitarios y expertos en Somalia dicen que cada vez más niños soldados están siendo utilizados por grupos involucrados en la creciente violencia en el país. Según dicen, la mayoría de los niños son reclutados o secuestrados por el grupo militante islámico al-Shabab y sufren horrendas experiencias en el campo de batalla.

La Agencia de Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF, estima que miles de niños de tan solo 10 años de edad participan en los combates. Isabella Castrogiovanni, jefa de la unidad de protección infantil de UNICEF en Somalia dice que el grupo islámico al-Shabab recluta la mayoría de los niños menores de edad.

Castrogiovanni dice que el grupo recluta a niños en escuelas, aldeas y otras comunidades, cada vez más por la fuerza. Asegura que en una de las campañas para reclutar a niños, integrantes de al-Shabab presionaron a familias para entregar al menos uno de sus hijos.

Una vez que se unen a sus filas, Castrogiovanni cuenta que a los niños y a otros reclutados se les dan teléfonos móviles que contienen videos motivándolos a luchar.

Ella ha visto uno de esos videos y describe lo que vio: “Se trata básicamente de un combatiente de al-Shabab que ha muerto, y hay mucha gente a su alrededor, incluyendo personas muy jóvenes, y alguien que está sentado al lado de su cuerpo repite una y otra vez: ‘Esta persona que ha muerto es un mártir, murió por una causa, irá al cielo’, y repite el lema de los infieles, de la yihad, de la obligación de luchar por la yihad, y así sucesivamente”.

Ella dice que el gobierno de Somalia, comúnmente llamado Gobierno Federal de Transición, también utiliza menores. Castrogiovanni dice que ella piensa que esto se debe principalmente a que el gobierno de transición no tiene las estructuras y los procedimientos adecuados para determinar la verdadera edad de los reclutas.

“Es decir, no estamos hablando de un ejército nacional igual al que otros países tienen, un ejército estructurado, controlado, centralizado en el que todos están registrados”, explica. “Hay varios grupos de milicianos que están asociados al gobierno de transición, pero no deben rendirle cuentas al comando central del gobierno”.

Es raro que al-Shabab hable con la prensa. Ha habido muchos informes independientes que constatan que niños están siendo reclutados por el grupo islámico. El embajador de Somalia en Kenia, Mohamed Ali Nur, dice a la VOA que el gobierno de Somalia tiene una política estricta de no utilizar niños soldados.

“Tenemos un comité en nuestras fuerzas que se está asegurando de verificar la edad de un joven o una joven si son reclutados como soldados, para verificar que no sean menores de edad”, cuenta Nur.

En los últimos meses, la lucha entre al-Shabab y el gobierno de transición se ha intensificado. Estados Unidos considera que al-Shabab es un grupo terrorista vinculado a al-Qaida. El gobierno de transición fue formado hace algunos años a través de un proceso internacional para traer estabilidad a este país inestable.

La Misión de la Unión Africana en Somalia, AMISOM, ha contribuido con tropas para ayudar a estabilizar el país y proteger al gobierno contra los ataques de al-Shabab.

El portavoz de AMISOM, el general Barigye Bahoku, cuenta a VOA que la mayoría de los niños soldados que sus tropas encuentran fueron secuestrados por al-Shabab de las escuelas islámicas y obligados a combatir. Bahoku asegura que algunos de los padres que piden por los niños o intentan rescatarlos son asesinados.

Según el portavoz de AMISOM, al menos tres niños por mes se entregan a su grupo. Y asegura que describen experiencias terribles.

“Ven morir a sus camaradas en la línea de batalla, los ven ser enterrados en tumbas poco profundas, y ven cómo aquellos que tratan de desertar o huir son asesinados”, dice. “Es una situación terrible”.

Bahoku dice que sus tropas también encuentran niños disparando en el campo de batalla.

“Intentamos hacer lo mejor que podemos en esas circunstancias”, dice. “Si logramos identificar que son niños menores de edad, intentamos darles opciones y les gritamos órdenes de que depongan las armas y huyan. Desafortunadamente, no hablar el mismo idioma es un gran problema”.

Castrogiovanni, de UNICEF, dice que cuando los niños están en la línea del fuego son muertos, mutilados, capturados o encarcelados, y solo unos pocos afortunados pueden escapar. “Es lo peor que uno puede imaginar”, asegura.

Somalia ha estado en guerra desde que el dictador Siad Barre fue derrocado en 1991.