Libia sigue preocupando al Congreso

Un senador dijo que no se debe ayudar a rebeldes de los que nos se sabe nada.

Algunos legisladores republicanos en el Senado y la Cámara de Representantes difieren del presidente Barack Obama.

La defensa hecha por el presidente Barack Obama de la participación de EE.UU. en las operaciones militares en Libia no parece haber convencido a muchos legisladores que todavía piensan que la misión de Washington en ese país sigue siendo un asunto muy polémico.

John McCain, el republicano de mayor rango en el Comité de Servicios Armados del Senado, admitió que el presidente hizo una buena defensa de por qué EE.UU. se involucró militarmente en Libia en su discurso del lunes.

Pero en un programa de televisión de la cadena CBS, MacCain se detuvo en la afirmación del presidente cuando dijo que ir más allá del establecimiento de una zona de exclusión en Libia y forzar la salida del poder de Moammar Gadhafi sería un error.

“Si Gadhafi se queda en el poder veremos un punto muerto, el mismo tipo de cosas que vimos con (el gobernante iraquí) Saddam Hussein cuando establecimos (en Irak) una zona de exclusión aérea, sanciones, etcétera, y duró 10 años”, dijo.

El senador señaló que con Gadhafi en el poder seguirá habiendo actos de terror contra el pueblo libio, y opinó que hay “que continuar todo el camino hasta Trípoli” y ayudar a las fuerzas rebeldes a sacar al gobernante libio lo antes que se pueda.

Otros republicanos criticaron a Obama más por lo que no dijo que por lo que dijo, y según un vocero del presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, “los estadounidenses siguen sin tener respuesta a la pregunta fundamental: ¿qué apariencia tiene el éxito en Libia?”.

Legisladores demócratas también dan la impresión de estar divididos en cuanto a la forma en que EE.UU. manejó el conflicto y también sobre lo expresado por Obama en su mensaje a la nación.

El líder de la mayoría en el Senado, Harry Reid, dijo que Obama trazó una clara visión de la libertad para Libia, mientras que el congresista por Missouri Emanuel Cleaver aplaudió el hecho de que el comando militar de las operaciones sea transferido a la OTAN porque EE.UU. no puede permitirse “otro Irak o Afganistán”.

Otros demócratas siguen estando fuertemente opuestos a una intervención militar de EE.UU. en Libia, especialmente sin el consentimiento del Capitolio, como el representante por Ohio Dennis Kucinich, que dijo que “EE.UU. es ahora el policía del mundo otra vez”, una postura que calificó de “realmente peligrosa”.

El senador republicano Rand Paul se hizo eco del asunto en otras palabras cuando dijo que “nuestros valerosos hombres y mujeres en uniforme son defensores patrióticos de nuestra nación”, y no debe pedírseles que sean “constructores de naciones o policías del mundo”.

Según Paul, los militares estadounidenses “deben prestar servicio en guerras autorizadas y pedidas por el Congreso de EE.UU., no por Naciones Unidas”.

A juicio del senador, el problema está en que “al enviar militares estadounidenses a ayudar a los rebeldes en Libia o en cualquier otro lugar significa se toma partido en un conflicto a nombre de gente de la que no sabemos nada”.

Se espera que funcionarios del gobierno testifiquen sobre Libia esta semana en el Capitolio, tanto en audiencias públicas como a puerta cerrada.